viernes, 5 de octubre de 2007

" La televisión la lleva. De divas, rostros y fenómenos ".


El texto " La televisión la lleva. De divas, rostros y fenómenos ". Por Graciela "Toto" romero y Ximena Torres Cautivo.

La noche del jueves se realizó el lanzamiento del nuevo libro de las periodistas María Graciela Totó Romero y Ximena Torres Cautivo, titulado "La tele la lleva: de divas, rostros y fenómenos", en el que desmenuzan y califican a los personajes de la pantalla chica local. Durante la presentación, Torres Cautivo señaló que la televisión actual se ha convertido en "una improvisación permanente".
"Yo siento que hoy día (la televisión) está cambiando todos los días. Está todos los días respondiendo al rating, a lo que pasa. Me da la sensación que es una improvisación permanente", manifestó Ximena Torres Cautivo sobre la televisión chilena. Para la periodista, la gran virtud de la obra es que reúne "todo lo que tú ves en los diarios, las calugas de espectáculo, aquí está todo junto".

¿Comó este aparatito inofensivo , tan poco decorativo, que ni con pañito a crochet encima se arreglaba, terminó convertido en una cosa viva y acusete , en una criatura casi alienígena , con pantalla plana y de plasma , que le dicen?

Este tipo de textos nos sirven para realizar lecturas analíticas las cuales requieren no sólo de tiempo sino de reflexión. No es cuestión de pasar los párrafos uno a uno sin detenerse a pensar que detrás de ellos hubo alguien que pensó de una determinada manera y nos lo transmitió.
La lectura analítica nos impulsa al pensamiento crítico. Formar a través del mismo nuestras propias opiniones.
No olvidemos que no hay una sola verdad, siempre habrá dos caras de una misma moneda y es lo que nosotros como lectores debemos descubrir o simplemente estar de acuerdo.

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" Educar es lo mismo que poner un motor a una barca... hay que medir, pensar,equilibrar... y poner todo en marcha. Pero para eso, uno tiene que llevar en el alma un poco de marino, ... un poco de pirata, ... un poco de poeta, ... y un kilo y medio de paciencia concentrada. Pero es consolador soñar mientras uno trabaja, que ese barco , ese niño, irá muy lejos por el agua. Soñar que ese navío llevará nuestra carga de palabras hacia puertos distantes, hacia islas lejanas. Soñar que cuando un día esté durmiendo nuestra propia barca, en barcos nuevos seguirá nuestra bandera enarbolada". Gabriel Celaya